Al tener los materiales de oficina adecuados, se puede reducir el tiempo y el esfuerzo requeridos para mantener una contabilidad precisa y actualizada. Sin embargo, hay casos en los que el material de oficina puede ser considerado como un activo. Por ejemplo, si una empresa adquiere un equipo de impresión https://bookmarkingfeed.com/story18985055/getting-my-papeler%C3%ADa-y-art%C3%ADculos-de-oficina-to-work